El anestesiólogo cumple con una de las labores más importantes ante procedimientos quirúrgicos.
Conforma el equipo encargado de salvaguardar nuestra vida en el quirófano y es el responsable de sedarnos hasta el punto de perder la conciencia y no sentir dolor.
Trasfondo a la anestesiología, rama de la medicina
Más allá de aquellos procedimientos quirúrgicos, el médico anestesiólogo o anestesista se halla aportando su especialidad en varias áreas de la medicina, como la oncología, obstetricia o urología.
En todas ellas cumplen con la labor de cuidar al paciente antes, durante y después de cualquier operación o intervención que asuma la entrada de objetos estériles al organismo.
Al hablar del médico anestesiólogo, se relaciona directamente con la anestesia y sedar al paciente por tiempo limitado.
Sobre la anestesia, se basa en generar relajación y privación de una zona concreta o de todo el cuerpo para aminorar con sustancial efectividad todo dolor.
El dolor es una respuesta sensorial del organismo ante un desencadenante, en este caso el pinchazo de una aguja, el bisturí, electrocauterio o cualquier otra herramienta quirúrgica provocaría dolor si no se sedara al paciente.
¿Cómo se llega a ser anestesiólogo?
Como cualquier otra especialidad médica, deben superar aproximadamente 5 años de la carrera de medicina, junto al internado y servicio social.
Aunado a esto, se añaden alrededor de 4 años de la especialidad basada en anestesiología y reanimación.
Todo el conocimiento adquirido durante los casi 10 años de preparación obligan al médico a realizar su labor con profesionalismo y exactitud.
Labor del anestesiólogo
El doctor encargado de la anestesia cumple también con distintas tareas, las cuales son de mayor relevancia durante la cirugía que en otras áreas médicas.
Como se habló a la brevedad, el médico anestesista se encarga de todo el medicamento anestésico y de la respuesta del organismo al dolor durante las operaciones.
Si bien suena tarea fácil, la participación del anestesiólogo inicia mucho antes del comienzo de la cirugía, llegando a ser considerado como el especialista perioperatorio.
Algo conocido como la consulta preanestésica involucra al anestesista y al paciente, esto con el fin de explicar ampliamente la reacción del cuerpo, resolver dudas, y la seguridad del medicamento.
Ya en el momento de la cirugía, además de preparar la anestesia, es el encargado de la monitorización de signos vitales reflejados en el equipo computarizado
También debe observar la respuesta corporal del paciente y vigilar cualquier señal que indique que el anestésico está por terminar.
Asimismo, se complementa con el médico cirujano y equipo de enfermería para la implementación de transfusiones, aplicación de líquidos y proceso de reanimación.
Otras actividades que realiza el médico anestesiólogo contemplan:
Método por el cual se administra la anestesia.
Vigilancia ante reacciones alérgicas del fármaco.
Tiempo de anestesia esperado.
Bloqueos periféricos.
Aplicación de anestesia localizada o generalizada.
Por último, de forma transoperatoria evalúa la recuperación motriz y cerebral del paciente, ya que la anestesia tiene la fama de “atontar” a los pacientes.
Tipos de anestesia
Los tipos de anestesia están directamente relacionados con el procedimiento a realizarse.
La anestesia local trata de inmovilizar una zona específica del cuerpo haciéndola indolora para el paciente y con la capacidad de moverla con limitaciones.
Por otra parte, la anestesia general es con frecuencia la más requerida en las intervenciones quirúrgicas y condiciona la sedación del paciente en su totalidad.
Otro tipo que puede agregarse es la anestesia regional, útil durante el parto y caracterizada por inmovilizar y privar de dolor a regiones extensas del cuerpo.
Anestésicos y analgésicos de uso en intervenciones médicas
El fármaco y su dosis dependen del procedimiento a realizar, morfología del paciente y antecedentes patológicos del mismo (alergias, tratamientos y enfermedades).
Los barbitúricos, anestésicos opioides e hidrocarburos halogenados son las familias de fármacos responsables de la anestesia general.
Mientras que las amidas, ésteres del ácido aminobenzoico o capsaicina son de gran utilidad en la anestesia local.
La característica de los anestésicos regionales es que son administrados mediante la inyección del fármaco, en este caso las amidas y opiáceos son los preferidos.
El médico especialista debe saber qué fármaco y qué cantidad usar para sedar a los pacientes.
¿Qué aspectos tiene un buen anestesista?
Las virtudes y profesionalidad característica de los anestesiólogos se refleja ampliamente en su capacidad para actuar de manera normal y ante imprevistos.
Entre los aspectos a considerar, un paciente espera recibir la mejor atención por parte de todos los médicos dentro de la sala de quirófano.
Y a raíz de esto, el anestesiólogo es el de primer contacto en quirófano porque induce el estado de anestesia que provee al cirujano la posibilidad de empezar con la intervención.
Un médico anestesista tiene que estar al tanto del paciente en todo momento, es por esto que consideramos los siguientes puntos como los más relevantes:
La concentración, precisión y reacción ante cualquier situación que exija su intervención.
Toma de decisiones de acuerdo a la cantidad de anestésico y complicaciones en el quirófano.
Destreza manual y audacia para proceder de emergencia cuando se requiera.
Capacidad para brindar total seguridad al paciente en tan poco tiempo.
Revisión y comprensión de todo signo vital hallado durante las cirugías.
Saber trabajar en equipo.
Razonamiento y cordura excelente en todas las cirugías.
Riesgos al practicar la anestesiología
Como toda rama de la medicina, la anestesiología está sujeta a riesgos laborales en caso de una mala práctica y deben considerarse.
El punto primordial de la especialidad es lograr la insensibilidad ante el dolor en los pacientes y la respuesta del organismo se acompaña de esto.
Problemas como la inefectividad del medicamento, dosis errónea, complicaciones durante la cirugía e inclusive el estado del paciente acarrean los problemas asociados con el dolor.
Si estos problemas se juntan pueden ocasionar un desenlace perjudicial para el paciente y también para el médico.
Por dicha razón, la buena práctica y conocimiento de la materia permiten evitar prejuicios en familiares, problemas en el paciente y demandas en el médico.
Como paciente, ¿Qué trato espero recibir?
Siempre hay que tener en mente la profesionalidad de los trabajadores del área de la salud; los riesgos mencionados no son frecuentes y suelen controlarse.
El anestesiólogo y los demás compañeros de trabajo siempre velarán por la vida de los pacientes y por solucionar cualquier problema que requiera una intervención.
Difícilmente podrían realizarse procedimientos quirúrgicos sin el apoyo y supervisión de un anestesista, mucho menos mantener el control de signos vitales.
De hecho, en la medicina antigua ni siquiera eran tomados en cuenta para cumplir las tareas que ahora llevan a cabo. Cosa que hoy en día ha cambiado para bien.
Es por ello que en su día se le agradece a cada uno su audacia, conocimiento y apoyo, porque son igual de importantes que toda especialidad médica.
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